Qué es una batería de litio para una moto eléctrica, cómo funciona y todo lo que necesitas saber…
Como ya sabemos la batería es el corazón de las motos eléctricas, es un componente fundamental que proporciona la energía necesaria para alimentar el motor eléctrico y otros sistemas eléctricos del vehículo. Este elemento no solo es el impulsor de todos tus viajes diarios, sino que determina la eficiencia, autonomía y la sostenibilidad en la experiencia de conducción. Es por eso que cuidar la vida útil de las baterías es crucial para garantizar un buen rendimiento como para evitar los costes derivados de un cambio de batería temprana.
Las baterías de tecnología de iones de litio, son una de las opciones más comunes y eficientes en la actualidad debido a su alta densidad de energía, larga vida útil y bajo peso en comparación con otras tecnologías de baterías.
En este blog queremos darte una guía para cuidar de este elemento esencial de tu moto eléctrica, con consejos prácticos y medidas preventivas para alargar y maximizar la vida útil de tu batería.
Entender el tipo de batería que alimenta tu moto eléctrica es el primer paso para garantizar su óptimo mantenimiento y prolongar su vida útil. En nuestro caso, se trata de baterías de iones de litio (Li-ion), un tipo de batería recargable que utiliza compuestos de litio como uno de los electrodos.
Las baterías de iones de litio se componen de las siguientes partes: un electrodo negativo o ánodo de donde salen los electrones y un electrodo positivo o cátodo que los recibe. Cuando se conecta la batería, los iones de litio se mueven desde el ánodo hasta el cátodo a través de un electrolito, dando lugar a la diferencia de potencial que produce la corriente. Cuando se carga la batería, los iones de litio vuelven al ánodo.
Las baterías de iones de litio (Li-ion) son conocidas por su alta densidad de energía, lo que significa que pueden almacenar más energía en menos espacio. Esto las hace ideales para motos eléctricas, ya que tienen una buena relación peso-rendimiento que permite recorrer distancias más largas antes de tener que recargarlas. Sin embargo, requieren un manejo cuidadoso y sistemas sofisticados de gestión de baterías (BMS) para evitar problemas de seguridad como el sobrecalentamiento.
Para mantener la salud de la batería de tu moto eléctrica respetar un proceso de carga adecuado es esencial. Se deben seguir las instrucciones específicas del fabricante para cada modelo, incluyendo utilizar los cargadores suministrados o cumplir con las especificaciones técnicas, mientras se siguen los tiempos y corrientes de carga recomendados.
En primer lugar, antes de cargar la moto es necesario apagar la corriente de la moto y desenchufar la batería. Además antes de enchufar la moto a la corriente debemos conectar el cargador a la batería.
Es muy recomendable mantener la batería en su rango de carga óptimo, normalmente entre el 20% y el 100% de su capacidad total. Esta práctica ayuda a prolongar la vida útil de la batería evitando el estrés de mantenerla a plena capacidad o descargarla por completo, ya que el uso con alta carga puede causar sobrecalentamiento y afectar a la vida útil de la batería.
Por buena práctica, recomendamos no descargar la batería por debajo del 20% de manera habitual y debemos evitar una descarga completa (hasta 0%), ya que, las baterías de iones de litio pueden sufrir daños permanentes una vez descargada completamente la batería de manera habitual, lo que reduce su capacidad para mantener la carga. Además, la sobrecarga puede hacer que la temperatura interna y la presión de la batería aumenten, resultando en una reducción de la eficiencia.
El almacenamiento tanto de las motos eléctricas como de sus baterías juegan un papel importante en la vida útil de estas. Las temperaturas extremas, tanto frías como calientes, pueden afectar de manera negativa a la vida útil y al rendimiento de las baterías. El calor excesivo puede acelerar la degradación de la batería, mientras que el frío extremo puede reducir temporalmente la capacidad de la batería y la eficiencia de carga.
Para evitar estos problemas, se recomienda almacenar la motocicleta y su batería en un ambiente con temperatura controlada entre 10ºC y 30ºC, lejos de la luz solar directa o condiciones de congelación. Y si, no piensas utilizar la moto durante mucho tiempo, lo mejor es retirar la batería y guardarla en un lugar seco a temperatura ambiente. Para periodos más prolongados, se recomienda cargar la batería al menos una vez cada 3 meses para asegurar su correcto mantenimiento y mantener un nivel de carga cercano al 60% para favorecer la correcta conservación.
Aunque no lo parezca, la forma en la que conducimos afecta directamente a la duración de la batería de una moto eléctrica. La conducción agresiva, la aceleración brusca y el frenado brusco utilizan la energía más rápido y reducen la eficiencia general del vehículo.
En su lugar, es mejor optar por un estilo de conducción suave y predecible para ayudar a ahorrar batería, con una aceleración gradual, manteniendo una velocidad constante y aprovechando al máximo el impulso del vehículo.
Hacer los mantenimientos periódicos por parte de un profesional son fundamentales para garantizar que todas las piezas de tu motocicleta eléctrica, incluida la batería, funcionan correctamente y que no existen posibles problemas que puedan afectar su vida útil.
Se recomienda seguir el plan de mantenimiento antes de actuar y no esperar a que se produzcan problemas.
Aunque hayamos seguido todos los pasos anteriores, las baterías de las motos eléctricas tienen un ciclo de vida limitado y necesitarán ser reemplazadas llegado el momento. Las baterías de litio son una alternativa más sostenible que las baterías de plomo, y en cuanto a movilidad, son una solución mucho más limpia, responsable y amigable con el medio ambiente; por eso no es sorprendente que puedan reciclarse. El primer paso en el proceso de reciclaje de las baterías es descargarlas completamente hasta que su voltaje sea cero, con el fin de evitar cualquier riesgo eléctrico. Luego, deberán desensamblarse, separando los materiales plásticos, de los cables y los metales. Los metales obtienen altas tasas de recuperación, de manera que puedan ser reutilizados.
En Vostok buscamos soluciones cada vez más sostenibles para cada parte de nuestros vehículos, por eso las baterías de litio que utilizan la Vostok E7 y E9 son enteramente reciclables. Asegurándonos sacar todo el provecho de su primera vida útil, y asegurar una segunda e incluso una tercera vida útil.
