Esta es la iniciativa que la Comisión Europea tiene en su plan de acción con la que pretende conseguir un crecimiento sostenible, inteligente y respetuoso con el medio ambiente.
La UE produce más de 2.500 millones de toneladas de residuos al año, generando consecuencias medioambientales catastróficas como la deforestación o las sequías. ¿Cómo? A través del consumo masivo de energía, la escasez de materias primas y la obsolescencia programada. Y no solo eso; cada persona residente en España genera una media de 450 kg de residuos urbanos.
Esta iniciativa pretende generar un cambio en la economía actual, la lineal, que se dedica a cerrar el ciclo de vida de los productos de usar y tirar.
La economía circular es un modelo social y económico de producción y consumo que implica el reciclaje, la renovación, reparación y reutilización para extender la vida de los productos y materias primas. El fin máximo es reducir la producción de residuos para utilizarlos como recursos (agua, energía, etc) y aumentar su vida útil. Está estrechamente ligado con la sostenibilidad y el cuidado medioambiental.
Nuestro sistema económico lineal se basa en extraer, fabricar, utilizar y eliminar productos y recursos. Podemos ver cómo este sistema va agotando las fuentes de recursos naturales y combustibles fósiles (como la gasolina). De esta manera, la economía circular se encarga de utilizar y optimizar todos esos residuos para aumentar su duración y evitar una producción nociva.
La economía lineal agota los recursos naturales, mientras que la circular propone un modelo de desarrollo sostenible, en el que la sociedad optimiza los residuos y recursos para aumentar su vida útil.
Los niveles de CO2 son tan elevados que necesitamos ponerle fin cuanto antes. La economía circular reduce estos niveles y mejora la calidad del aire que respiramos.
Todos esos residuos se convierten en nuevos recursos. Se revitalizan las prestaciones de los productos y materiales para exprimir todo su potencial.
Un gesto tan simple como cerrar el grifo cuando te cepillas los dientes, apagar la luz cuando sales de una habitación, reutilizar lo que tienes en casa, reducir el consumo de residuos de un solo uso o reciclar pueden ayudar a aumentar la edad de la Tierra y la de todos nosotros.
Enlaces de interés:
Fondos Estructurales y de Inversión Europeos, Horizonte 2020, el Fondo Europeo para Inversiones Estratégicas (FEIE) y el programa LIFE.
